No me olvides

No me olvides

Te perseguiré hasta la muerte aunque no me ames, y tras atravesar su frontera me volveré inerte para poder seguir tu estela. Me transformaré en niebla para enturbiar tus sueños, en mar para amaestrar las mareas hasta que te mezan, en barca para llevarte a la deriva por los mares de la indecisión, en aire para cantar las nanas que te duerman.

     Seré el sol que te guíe en el horizonte, la luna que te cante por las noches, el elemento que avienta el toldo de tu embarcación. Seré el mundo y su giro de gravitación, la magia que te suspenda en la nada, la brisa que acaricie tu cara cuando te azote el sudor, la sal que dome el mar cuando las olas amenacen tu serenidad interior.

     Seré cuanto necesite ser para seguir tus pasos en vida o muerte; me convertiré en ángel o en vengador si con ello soy tu sombra o tu rayo de sol. Seré tu azote si así me sientes, tu caricia si así te estorbo. Seré cuanto exista para ti; ya me odies, me ames, me desprecies o me alabes… porque solo quiero ser algo que tienes presente: algo real, y no inerte. 

     Aunque no me ames, si me odias me basta, pues solo existiré si tú me ves. Preferiría ser amado, pero ser odiado es más aventajado que inerte e inexistente, olvidado como el musgo bajo una roca, perdido como el ave que sobrevuela el mar con un ala rota. Ódiame, ámame, pero siénteme: porque tu indiferencia es lo que me ahoga.

     Te quiero, pero puedo odiarte. Podré ser lo que tú quieras si así consigo que me mires, porque yo jamás podría olvidarte. Si me ignoras en realidad me borras, como al trazo de un lápiz lo anula una goma. Porque es preferible ser repudiado que vivir una vida en blanco: y es mejor haber amado y perdido, que haberse perdido por nunca haber amado.

Edelweissdenume.blogspot.com. 

Relatos novela y poemas de 

 Melina Vázquez Delgado.